Résumé:
El desarrollo productivo de agrupaciones de pequeñas comunidades del sector rural en el Ecuador se ha visto afectada por décadas, debido a los constantes cambios de mandatarios con nuevas políticas para gobernar al país, que han impulsado el retraso del crecimiento de asociaciones, especialmente del sector agrícola. Actualmente la estabilidad política de los últimos años ha permitido atender a este sector de la población. A través del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (MAGAP), cooperativas y asociaciones del país dedicadas a la producción, comercialización de bienes y prestación de servicios se han beneficiado de los proyectos que brinda la institución por medio del gobierno, para incentivar el emprendimiento productivo y generar riqueza a las familias dedicadas al agro. A pesar de la atención que hoy en día reciben las miles de asociaciones existentes en el país, es palpable los problemas por los cuales cientos de asociaciones tienen que afrontar; un ejemplo de lo mencionado está la Asociación de Trabajadores Agrícolas Autónomos del Recinto San Francisco de Soledad perteneciente al cantón Simón Bolívar, la situación que se suscita en esta agrupación es desalentadora, la falta de compromiso de sus miembros ante la administración llevada a cabo por la Junta Directiva de la misma, ha desencadenado en el retiro de gran parte de los asociados. El presente trabajo de investigación, recoge información sobre la importancia que tiene la correcta administración de una asociación agrícola en el comportamiento de sus miembros, así como también se recalca la confianza y la comunicación que debe prevalecer en toda organización para que ésta logre sus propósitos. El estudio de estos aspectos será posible por medio de encuestas y entrevistas a los actores propios de esta situación, para poder dar soluciones que permitan cambiar el panorama que en la actualidad está asumiendo.