Resumen:
Las infecciones del tracto urinario afectan los riñones los uréteres la vejiga y la uretra se
estima que más de 150 millones de personas en todo el mundo desarrollan infecciones del tracto urinario cada año afectando a la población en general pero las mujeres son el grupo con mayor riesgo ya que el tracto urinario femenino es relativamente corto y la distancia para que entren las bacterias es corta A lo largo de los años las es más difícil aplicar un tratamiento que sea afectivo a corto plazo debido que los microorganismos asociados a la infección son cada vez más resistentes a los antibióticos convencionales Por ello el objetivo de esta investigación fue evaluar los mecanismos de resistencia a antibióticos de uropatógenos en las infecciones del tracto urinario mediante un enfoque bibliográfico Para el estudio se recopilo 143 artículos para la revisión bibliográfica y 73 artículos para el análisis bibliométrico Los principales microorganismos a los que se les atribuyen las infecciones del tracto urinario son las bacterias especialmente a ESKAPE acrónimo de las siguientes bacterias Enterococcus faecium Staphylococcus aureus Klebsiella pneumoniae Acinetobacter baumannii Pseudomonas aeruginosa e Enterobacter spp además son ejemplos de uropatógenos que presentan mecanismos de resistencia variados tales como la producción de betalactamasas de espectro extendido BLEE carbapenemasas y genes de resistencia a múltiples clases de antibióticos
El interés científico en los mecanismos de resistencia de los microorganismos asociados a infecciones del tracto urinario ha mostrado un notable aumento desde 2019 hasta la actualidad evidenciados por los 7 artículos publicados en Pubmed en el 2019 y su aumentaron a 19 para el 2023 Australia se destaca como el país con mayor producción científica sobre este tema seguido por China Alemania Irán Rusia y Estados Unidos y los términos más frecuentemente utilizados en los estudios son humans y female reflejando el impacto significativo de estas infecciones en la salud de las mujeres
El desarrollo de estrategias de tratamiento y manejo efectivas salvaguardando así la salud pública y garantizando opciones terapéuticas adecuadas para la población vulnerable entre ellas se recomienda enfáticamente mantener una buena higiene personal mantener una adecuada hidratación evitar retener la orina y promover el uso responsable de antibióticos para minimizar la aparición de resistencia y maximizar la eficacia del tratamiento
