Educación nutricional en embarazadas adolescentes captadas con bajo peso, del Centro de Salud Canoa periodo de enero a mayo del 2024

Abstract

La educación nutricional en embarazadas adolescentes con bajo peso es crucial debido a los riesgos adicionales para la salud de la madre y el feto considerando los desafíos que el embarazo adolescente ya conlleva Este tema es de gran relevancia y actualidad en la sociedad En el Centro de Salud Canoa se ha observado un número significativo de embarazadas adolescentes con bajo peso durante el período de enero a mayo de 2024 el objetivo de este estudio es transmitir educación nutricional efectiva para embarazadas adolescentes captadas con bajo peso y atendidas en el Centro de Salud Canoa durante el período de enero a mayo de 2024, se utilizó un diseño mixto de investigación tanto cualitativo como cuantitativo se analizó los de datos del Seguimiento Nominal (gestantes con ganancia inadecuada con bajo peso y obesidad) y PRASS-SISEN (registro de atenciones de las pacientes) relacionados con el estado de salud el peso y otros indicadores la muestra contemplada fue de 22 embarazadas adolescentes Los resultados revelaron que la mayoría de las adolescentes con bajo peso tienen entre 12 y 23 años representando aproximadamente el 60% del total. Un significativo 31.8% está en la categoría de bajo peso En términos de educación nutricional, el 45.4% demostró una comprensión adecuada y el 36% una muy buena comprensión Además, el 68% de las participantes está completamente dispuesto a cambiar su dieta para mejorar su salud Específicamente, el 73% eliminó completamente los alimentos procesados y el 18% redujo significativamente su consumo Se concluye que los datos muestran una progresión positiva en los hábitos alimentarios de las adolescentes embarazadas a lo largo del tiempo desde una posible falta de conciencia inicial hasta una mayor atención y adopción de una dieta más equilibrada conforme avanza el embarazo además se infiere la sensibilización de que la educación nutricional contribuye a una mayor conciencia sobre riesgos gestacionales lo que habría motivado cambios positivos en sus hábitos alimenticios y estilo de vida