Abstract:
La carencia de juegos organizados provoca en los niños y niñas un clima escolar conflictivo que afecta en su desarrollo intelectual y social. Está científicamente comprobado que los niños y niñas aprender de manera significativa, cuando se desenvuelven en ambientes lúdicos y manejando juegos guiados. Cuando los niños juegan estimulan la memoria, reconocen símbolos y mejoran la atención, estas aptitudes son necesarias para consolidar el proceso de enseñanza aprendizaje. Es un medio fundamental que permite la activación y estructuración de las relaciones con los demás, sin ningún tipo de prejuicios, estos regulan sus emociones conflictivas internas y externas les ayudas a procesar su vivencia diaria y hasta superar dificultades síquicas. El maestro debe poseer un buen manejo del aula, tiempo, complicidad lúdica y una alta creatividad, esta incidirá en el mejoramiento de destrezas, habilidades intelectuales y conceptuales. El propósito de este trabajo es implementar los juegos organizados en los momentos de recreo con el involucramiento de los docentes estos necesitan compartir con ellos sus sueños, preocupaciones, socializar las experiencias, siendo así este una magnifica herramienta de trabajo y más aún una estrategia de aprendizaje. El compromiso, la participación y colaboración efectiva del padre de familia es fundamental así el niño crece desarrollando habilidades cognitivas, sociales y emocionales.